El superclásico entre Boca y River, que se jugará el sábado en Mar del Plata, tendrá un imponente operativo de seguridad, con 850 efectivos en la cancha, pero si se le suman los agentes que custodiarán las rutas y la zonas claves de la ciudad habrá más de 1.500 policías procurando que no se produzcan disturbios. La mayor preocupación de cara al superclásico del sábado es el relacionado con la interna de la barra brava de Boca, que estuvo a punto de explotar el sábado pasado en Mar del Plata de no ser por la intervención y los trabajos de inteligencia previos, realizados por la gente del COPROSEDE. El dato llamativo que circuló por estas horas en Mar del Plata tiene que ver con que el sábado la tribuna de Boca sería ocupada por el grupo de Lomas, que fue al que se le aplicó el derecho de admisión en el partido ante San Lorenzo. Habrá que ver que hace la gente de Mauro Martín, el líder actual de la "12", la barra brava de Boca, si esto llega a suceder.
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